Inteligencia emocional

Desarrollar esta inteligencia nos posibilita vivir los acontecimientos diarios de una forma sana y saludable, no solo con los otros, sino también con los que nos rodean. ¿Cómo lo entrenamos?

• Autoconocimiento: yo me conozco, es decir, hay tomar conciencia de nuestras debilidades y fortalezas para aumentar la confianza y seguridad en sí mismo. Reconocer las creencias, limitantes, ideas sobre nosotros y el mundo, que hemos ido adquiriendo en nuestra infancia, y transformarlas en creencias potenciadoras que nos ayudarán a fundamentar la seguridad personal
• Gestión emocional: conocer nuestras emociones, contactar con ellas, nombrarlas y conectar con ellas para encontrar y saber el mensaje de crecimiento que nos traen. Gestionarlas, aplicándo las herramientas que poseemos para afrontar las experiencias emocionales.
• Automotivación: experimentar que las fuerza de impulsar tu vida y superar los obstáculos, está en ti y solo en ti.
• Empatía: que nace del conocimiento profundo que nos lleva a conectar con lo profundo de la persona que tengo enfrente.
• Profundizando en las habilidades sociales: practicar un lenguaje positivo, consigo mismo para ejercitar una buena comunicación que nos ayudará a gestionar los conflictos de la vida diaria